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3 consejos para fomentar el cambio
Chip y Dan Heath son dos hermanos que consiguieron que su primer libro «Made to Stick» fuera un best-seller y encandilara a la gran mayoría de sus lectores.
Chip y Dan Heath
La versión española se llama «Pegar y pegar» y, aunque la traducción deja bastante que desear, vale la pena leerla por la cantidad de ideas y ejemplos que nos dan para intentar que una idea sea pegadiza (se entienda, se recuerde y cambie el comportamiento). Un libro altamente recomendable para cualquier persona que quiera que sus ideas no queden en el olvido y por tanto, muy indicado también para docentes.
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Hace un par de días os contaba que he empezado el segundo libro de los hermanos Chip. En esta ocasión nos hablan sobre cómo fomentar el cambio (individual, de organizaciones o social). En el primer capítulo nos muestran las bases de lo que tratará el libro y nos hablan de un jinete que monta un elefante y tiene que dirigirlo por caminos para ir a algún lugar. El jinete representa nuestra parte racional, el elefante la parte emocional y el camino el contexto y las circunstancias (el primer capítulo está disponible, en inglés, en la página de los autores).
Imagen de justinmccarthy (flickr)
La cuestión es que el jinete (parte racional) a veces no puede con la masa y la fuerza del elefante (parte emocional). Otras veces no sabe hacia donde dirigirse, el camino no está claro. Chip y Dan Heath nos cuentan varias historias que ilustran los tres puntos que desarrollarán en su libro para fomentar el cambio. Para ello tendremos que…
- Dirigir al jinete: Lo que a menudo se percibe como resistencia al cambio normalmente es falta de claridad. Debemos proveer una dirección bien clara a seguir.
- Motivar al elefante: Lo que a menudo se percibe como pereza normalmente es agotamiento. El jinete no puede controlar a un elefante que no le hace demasiado caso durante mucho tiempo. Es necesario apelar a la parte emocional de las personas.
- Dibujar el camino: Lo que a menudo se percibe como un problema de las personas normalmente es un problema de las circunstancias. Si damos forma a un camino por donde pasar, será más fácil para las personas tomarlo (recordad la historia de los alumnos que se olvidaban de leer su tarea semanal).
Es curioso porque son aspectos que me han pasado alguna vez por la cabeza pero nunca de esta forma tan didáctica y con tanto detalle. Estoy convencido de que, en muchas ocasiones, nuestros alumnos no responden como esperamos por la falta de claridad, porque no estimulamos su parte emocional o porqué no les facilitamos el camino.
Que nadie piense que soy partidario de darlo todo masticado, ni mucho menos. Pero de ahí a facilitar las cosas, dibujar el camino, ofrecer una dirección clara a tomar y potenciar la parte emocional hay una diferencia.
Porque precisamente los profesores tenemos muchísima más experiencia que los alumnos y por tanto, no podemos dejar que nos atrape el mal del conocimiento, que consiste en que cuanto más sabemos, peor nos explicamos ya que damos por sentado un montón de cosas que los alumnos no tienen porque saber. Este concepto lo tratan los hermanos Heath en su primer libro y es algo que deberíamos tener muy pero que muy presente los que nos dedicamos a la enseñanza. Pero eso será mejor que lo dejemos para otro futuro artículo.
Un alumno de informática que es un artista
Final de curso. Toca acabar de corregir trabajos y exámenes. También introducir las notas en una hoja de cálculo. Mientras hacía esto último he topado de nuevo con ejercicio que me hizo un alumno de Grado Medio de Informática en un examen. Tenían que explicar un sistema de clave privada usando un esquema. El alumno se llama Dani y es un artista, le gusta el hiphop, cantar y componer temas, los graffitis, el diseño gráfico. Así que sacó todo su potencial para contarme lo que le pedía. Ya le dije que lo utilizaría para cursos siguientes, con su permiso.
A Dani no le motiva demasiado la informática pero le brillan los ojos cuando hace las cosas que a él le gustan. Creo que debería hacer otros estudios más artísticos pero… ¿quién se lo impide? ¿Los profesores porque queremos que se quede en nuestros estudios? ¿Los padres porque esto de las cosas artísticas no sirven de nada ni dan de comer? ¿O el mismo alumno porque cree que tiene que hacer «lo que toca» o lo que le aconsejan sabiamente los adultos? Quizá si leyera el libro «El Elemento» de Ken Robinson sabría encontrar las respuestas.
La culpa no siempre es de los alumnos
Esta mañana he empezado a leer el último libro de los hermanos Heath: «Switch: How to change things when change is hard». Título que traduzco a mi manera como: «Interruptor: Cómo cambiar las cosas cuando el cambio es difícil«.
El caso es que llevaba sólo tres páginas leídas y ya he topado con la primera joya. ¿Cómo podemos lograr que la gente coma menos palomitas cuando va al cine? Algunos plantearían la necesidad de hacer campañas de sensibilización para motivar a las personas a que tengan hábitos más saludables, etc. Loable, sí, pero poco efectivo. La solución consiste en reducir el tamaño de las cajas de palomitas. Según varios estudios, la gente come más palomitas cuando las cajas son de mayor tamaño (aunque posteriormente nieguen esta evidencia). La conclusión es la siguiente:
Lo que a menudo parece un problema de las personas en realidad es un problema de las circunstancias.
Pongamos ahora un ejemplo más cercano. Un profesor asignaba una tarea semanal a sus alumnos que consistía en que tenían que leer unos textos. Para su desesperación siempre había alumnos que olvidaban leer su parte y no entregaban su tarea. Este profesor se dio cuenta de que un compañero suyo les grapaba el recordatorio de lectura en las agendas de los alumnos y de esta forma era casi imposible que los estudiantes olvidaran esta tarea. Lo que parecía un problema de actitud o de los alumnos en realidad era un problema de las circunstancias, situación o contexto (artículo original en inglés, aquí).
Sin eximir a los estudiantes de sus obligaciones, ya que todos debemos poner de nuestra parte, me atrevería a decir que a menudo los docentes culpamos a los alumnos de sus actitudes con demasiada facilidad. Probablemente, cambiando el contexto, lograríamos resultados mejores. Esto tiene muchos matices, lógicamente, pero de momento lo dejo ahí. El debate queda abierto 🙂
El efecto Pigmalión en la educación
Cuenta la leyenda que Pigmalión, rey de Chipre y escultor, no encontraba a la mujer que se acercara a su ideal de perfección femenina.
Cansado de buscar, esculpió en marfil a Galatea, su ideal de mujer. Su estatua era tan bella y perfecta que Pigmalión se enamoró de ella tanto que la besaba y la vestía con preciosas telas.
Pigmalión suplicó a Venus, la deesa del amor, que su estatua cobrara vida para ser correspondido. Cuando volvió a casa, observó que la piel de la estatua era suave. Besó a Galatea y ésta se despertó y cobró vida, convirtiéndose en la deseada amada de Pigmalión.
Hoy en día, se utiliza la expresión «efecto Pigmalión» para describir el siguiente fenómeno psicológico:
«El efecto Pigmalión es el proceso mediante el cual las creencias y expectativas de una persona respecto a otra afectan de tal manera en su conducta que la segunda tiende a confirmarlas. Del mismo modo que el miedo tiende a provocar que se produzca lo que se teme, la confianza en uno mismo, ni que sea contagiada por un tercero, puede darnos alas»
Aplicamos el efecto Pigmalión constantemente en nuestras vidas, algunas veces para bien (confiando) y otras para mal (desconfiando). Los docentes no escapamos de este efecto y creamos expectativas sobre los alumnos que determinan en gran parte su rendimiento final.
Cito a continuación parte del artículo de la Wikipedia sobre el efecto Pigmalión, en referencia al ámbito educativo:
«Rosenthal y Jacobson estudian el efecto Pigmalión desde la perspectiva de la teoría de la profecía autorrealizada. Esta teoría la entendemos como uno de los factores que influyen en la motivación de los alumnos en el aula. Aparentemente parece que es un efecto mágico, pero no lo es, lo que ocurre es que los profesores formulan expectativas acerca del comportamiento en clase de diferentes alumnos y los van a tratar de forma distinta de acuerdo con dichas expectativas. Es posible que a los alumnos que ellos consideran más capacitados les den más y mayores estímulos, más tiempo para sus respuestas, etc. Estos alumnos, al ser tratados de un modo distinto, responden de manera diferente, confirmando así las expectativas de los profesores y proporcionando las respuestas acertadas con más frecuencia. Si esto se hace de una forma continuada a lo largo de varios meses, conseguirán mejores resultados escolares y mejores calificaciones en los exámenes.»
Los docentes deberíamos aplicar el efecto Pigmalión positivo y formular expectativas positivas sobre todos nuestros alumnos, aunque veamos indicios de que no son tan buenos, les cuesta más, parecen más vagos, etc. Las respuestas de los estudiantes mejorarán sensiblemente con este planteamiento.
Por último, pero no menos importante, tenemos que ser muy conscientes de que aplicamos el efecto Pigmalión, a menudo negativo, con otros compañeros de profesión. De este modo estigmatizamos, demonizamos y respondemos a las acciones de ciertos docentes influidos por las malas expectativas o experiencias que hemos tenido con ellos. Como mínimo, deberíamos ser conscientes de ello.
Os dejo un vídeo muy interesante que muestra muy claramente la respuesta negativa de alumnos de primaria con un efecto Pigmalión negativo. Fue un experimento que se hizo por primera en Estados Unidos en el año 1968. Lo ideó la maestra Jane Elliott y tenía por objetivo concienciar a sus alumnos de los prejuicios raciales de su sociedad. ¡Realmente los concienció! Con un aprendizaje vivencial que se basaba en distinguir a los alumnos según el color de sus ojos. Altamente recomendable.
El documental está dividido en seis vídeos, aquí tenéis el primero, para ver el resto podéis visitar esta página de Youtube.
Stop motion en Visual y plástica de la ESO
Esta mañana me han mostrado un vídeo de YouTube que me ha llamado la atención. Se trata de un trabajo de alumnos de 4º de ESO donde han practicado la técnica del «stop motion«. Bajo la supervisión del profesor Abel del Castillo, algunos alumnos del instituto IES Vinyet de Sitges han realizado este divertido cortometraje.
Creo que es una forma muy acertada de mezclar trabajos manuales con nuevas tecnologías. Los chavales tienen que moldear figuras y objetos con plastilina pero también trabajar la edición de vídeo y audio así como las tomas fotográficas de las escenas.
Un proyecto motivador que acaba en un producto que se publica en YouTube para poder enseñarlo a padres, madres, amigos, etc.
Enhorabuena por este tipo de iniciativas. ¡Que cunda el ejemplo! 🙂
Edumanga: el cómic japonés como recurso educativo
Últimamente me estoy dejando parte del sueldo en libros que compro en amazon.com (y en amazon.co.uk, que la libra esterlina está muy baja)
Parece ser que no gasto lo suficiente porque voy recibiendo mensajes de amazon con novedades, recomendaciones y otras artimañas para consumir aún más. La cuestión es que un dia hice clic en la sección de libros de texto y me llamó mucho la atención un libro de estadística en formato manga.
Hice uso de la característica de «hojear» el libro de forma electrónica, viendo la portada, tabla de contenidos y algunas páginas al azar y me faltó tiempo para añadirlo al carrito de la compra. Indagando un poco más descubrí que había otro libro en formato manga sobre bases de datos. También lo añadí, entre otros motivos porque doy un crédito de esta materia a un primero de Grado Superior de Informática.
Los recibí hace un par de días y no me han defraudado. La mayor parte de estos libros contiene una historia en formato manga con unos personajes que van introduciendo los conceptos pertinentes. También contienen páginas donde no hay cómics pero si hay texto y resumenes o ejercicios propuestos con las soluciones al final del libro. Ved como muestra el índice del libro de estadística y el índice del libro de bases de datos (PDFs en inglés).
Próximamente saldrán otros libros edumanga de Cálculo, Electricidad o Física.
A mi me parece una gran idea por varias razones:
- El resultado final es eminentemente visual, ya sea por los dibujos en sí como por los ejemplos que aparecen para ilustrar conceptos teóricos.
- Hay una historia con personajes en cada libro, con sus personalidades y sus conflictos. Ello ameniza enormemente la adquisición de nuevos conceptos.
- Por los comentarios de gente que ha comprado estos libros, parece ser que enganchan a jóvenes adolescentes mucho más fácilmente que con los libros más convencionales.
Curiosamente las reacciones de profesores y alumnos han sido un poco dispares. Lo he mostrado a varios compañeros de profesión y todos ellos han quedado gratamente sorprendidos y se han interesado por la novedad. Sin embargo, al mostrarlo a los alumnos de Grado Superior, han habido varios comentarios jocosos y hasta cierto punto despectivos al respecto. Parecía como que, si no es formal y aburrido, no parece adecuado para aprender.
Creo firmemente que se puede aprender de forma más «informal» y menos seria siempre y cuando estén los conceptos importantes y necesarios explicados.
Me encantaría que en nuestro país alguna editorial fuera lo suficientemente valiente como para llevar a cabo una iniciativa parecida, con cómic occidental o con manga, me da lo mismo.
La editorial que está detrás de todo esto se llama «No starch press» y en su catálogo de libros tienen unos cuántos que son más convencionales, la mayoría de ellos relacionados con la informática.
¿Y tú que opinas?
¿Como profesor, utilizarias este recurso si estuviera disponible en castellano?
¿Como alumno, te parecería buena idea utilizarlo como libro de texto?
Aprende inglés con los vídeos de Yappr
Siempre he creído que para aprender algo hay que practicarlo. Pongamos como ejemplo el aprendizaje del inglés. ¿Cuántas personas van a cursos para aprender este idioma año tras año y sin embargo no mejoran notablemente su nivel? O quizás mejoran la gramática y cierto vocabulario, sobre el papel o en el aula pero cuando hay que entender una noticia de la CNN o una conversación con nativos la cosa se les complica más de lo que desearían.
Tampoco quiero decir que no sean necesarias dichas clases. Pero seguramente es necesario además:
- leer en inglés (originales en vez de textos adaptados)
- escuchar canciones o noticias en inglés
- ver vídeos o películas en inglés
- hablar con gente en inglés
Gracias a Internet y a los servicios que brinda es posible hacer todo esto, de forma gratuita en la mayoría de los casos.
Un claro ejemplo es Yappr, un sitio web que ofrece vídeos en versión original con las siguientes características:
- Aparece el texto de los subtítulos en castellano y en inglés, sincronizado todo con la voz del vídeo.
- Existen botones especiales como el de «Repetir última frase» o «Voz clara«, siendo éste último muy útil ya que repite la frase original pero de forma lenta, clara y bien pronunciada.
- Los usuarios registrados pueden subir y/o traducir vídeos.
En resumen, una herramienta muy útil tanto para estudiantes de este idioma como para profesores con ganas de motivar a sus alumnos.
Alice, estimulante aplicación para aprender a programar
Una de las asignaturas que suele costar más a los alumnos que estudian Informática es la programación.
Generalmente se enseña en el primer curso la programación estructural y a partir del segundo, la programación orientada a objetos. Sin embargo, también hay centros donde enseñan directamente la última modalidad desde el principio.
El problema es que los estudiantes se ven a menudo abrumados por los conceptos nuevos y por la abstracción que implica la programación.
En la universidad de Carneggie Melon se plantearon qué podían hacer para evitar el creciente fracaso de los estudiantes de Informática de su universidad. También decidieron hacer frente al gran abandonamiento por parte de las chicas que empezaban la carrera.
Fotografía de «The Michael» (cc) by-nc-sa
La solución fue crear un entorno de programación denominado Alice y que permite familiarizarse con los conceptos necesarios de forma visual y sencilla, arrastrando objetos y minimizando la posibilidad de error. Los objetos son representados mediante un entorno virtual en 3D. De este modo, es posible ver al instante todo lo que se está añadiendo o modificando. Esto resulta altamente motivador para los alumnos.
La buena noticia es que es totalmente gratis y que está disponible para Windows, Mac OS y Linux.
Además, parece ser que a partir de la próxima versión de Alice, la 3.0 estarán disponibles los personajes del famoso juego «The Sims 2«. Esto no hará otra cosa que motivar aún más a los estudiantes ya que muchos de ellos reconocerán a los personajes, pues habrán jugado con ellos. La calidad gráfica de los modelos 3D también mejorará notablemente.
Podéis ver el vídeo promocional de este innovador entorno de programación (en inglés). Según este mismo vídeo, después de utilizar Alice en el primer curso de Informática, hubo más estudiantes que pasaron a segundo curso y con mejor nota.
Lo he descargado y he estado probándolo un poco y parece que está realmente bien. Supongo que sería una buena opción para introducir la programación a nuestros alumnos de Ciclos Formativos de Informática. Habrá que estudiarlo con más detenimiento para poder llevarlo a cabo de forma adecuada.
[Vía TecnoTIC]
¿Mata la escuela la creatividad?
Tengo un nuevo ídolo. Siempre lo citan como Sir Ken Robinson y es un gurú de la Educación (sí, sí, con mayúscula) y de la creatividad.
Lo descubrí en una charla de TED.com, de hecho está entre las 10 mejores charlas de TED. Aún no he visto todas las demás pero me atrevería a decir que quizá es la mejor de todas.
La gente de TED organiza un evento una vez al año donde invita a pensadores, científicos, ingenieros, profesores y dan una charla limitada de 20 minutos de tiempo como máximo. La mayoría de ellos utiliza como soporte visual un proyector multimedia y una presentación de tipo Powerpoint.
Pero a Sir Ken Robinson no le hace falta ningún proyector. Él solito, plantado en medio del escenario y sin apenas moverse, es capaz de mantener la atención de la audiencia combinando de forma magistral lo que quiere transmitirnos con toques de humor que la hacen aún más entretenida.
Creo que todo profesor o padre el mundo debería ver esta presentación (todos estamos o hemos estudiado en algún centro educativo). Quizá sea un problema para las personas que no entienden el inglés pero el resto no dejéis de verla, por favor. Estoy convencido de que os gustará, y mucho.
Os cito sólo una frase de su exposición:
«If you’re not prepared to be wrong, you’ll never come up with anything original.»
Que traduzco libremente como:
«Si no estás preparado para equivocarte, jamás crearás algo original»
A partir de esa premisa sigue explicando que:
- Los niños NO tienen miedo a equivocarse.
- Al llegar a adultos, la mayoría han perdido esa capacidad. Tienen miedo a equivocarse.
- En los sistemas educativos tradicionales equivocarse es lo peor que puedes hacer.
- El resultado es que estamos educando a las personas fuera de sus habilidades creativas.
En fin, no os entretengo más, reservad 20 minutos y disfrutad de la charla.
Bradbury en Marte 